sábado, 11 de febrero de 2017

Ya no trato

No sé cuándo ocurrió el desastre en que todo venía y nos hundíamos todos, como si eso nos absorbiera
Como si nos hundiéramos
Como si siguiéramos cayendo y la materia, lo que somos, todo lo que existía incluso lo que pensamos estaba
Tu dios también se derrumba, lo absorbo en esta miseria, en la podredumbre que infecta mi cuerpo, mis órganos, lo que pienso
Yo sigo sintiendo que me hundo, y me lo llevo todo a ese gran abismo que son mis emociones
Un agujero, un hueco donde recuerdo no sólo los muertos, sino los vivos que desearía estuviesen muertos, pasar sobre sus tumbas y perdonarlos
Porque algunos se escaparon a tiempo de mi desastre, de la miseria que nunca se va
De mi, que nunca me voy
Yo sigo creyendo que todos estamos dentro de la licuadora galáctica y que algún día seremos capaz de perdonarnos, de olvidarme de todas las veces que me tiraron a un lado, yo que casi pude ser inalterable
Y ustedes encuentren el perdón que necesito por todo lo que no hice, por lo que no he dicho, porque de verdad siempre lamenté todas las despedidas que aún no existen, cuando me hice a un lado porque tenía miedo de decirles adiós
Ojalá, quizás me perdonen por evitar la realidad, por esconderme, siempre tuve miedo, ahora tengo miedo, otra vez hice, hago todo mal.
Perdón por eso que también estoy haciendo.

1 comentario:

  1. No sé como, ni por qué llegue acá.
    Un abrazo.

    Me gusta eso de la "licuadora galáctica".

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